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Disciplina Positiva, colaboración y aliento.

Debemos darnos cuenta de que no podemos construir sobre deficiencias, solo sobre fortalezas. No podemos ayudar a nuestros niños – ni a nadie más – a tener fe en ellos mismos mientras nosotros no tengamos fe en ellos.

                          RUDOLF DREIKURS. “Social Equity: The Challenge of  Today”

Disciplina Positiva es una filosofía educativa fundada por las terapeutas norteaméricanas Jane Nelsen y Lynn Lott, tiene sus raíces en la Psicología Individual de Alfred Adler y su discípulo Rudolf Dreikurs. Actualmente Disciplina Positiva está presente y activa en todos los continentes gracias a los Educadores y Entrenadoras Certificados de Disciplina Positiva por la Positive Discipline Association. Su labor consiste en ayudar a madres, padres, docentes, maestras/os, educadores, entre otros, a desarrollar sus habilidades a través de la práctica de herramientas educativas que respetan al niño y al adulto al mismo tiempo. Su metodología se basa en “aprender haciendo” a través de talleres vivenciales donde gracias a la escenificación de situaciones comunes en la vida familiar y escolar nos ponemos en la piel del niño u adolescente para poder entenderle mejor y llegar así a ofrecerle una mejor ayuda. Los Educadores o Entrenadores de Disciplina Positiva no actúan como expertos sino como facilitadores, permitiendo a padres y profesores así como otros profesionales que conviven con niños y adolescentes, la comprensión de problemas comunes de una forma significativa y real. Los facilitadores son profesionales que han experimentado los beneficios y los retos de esta filosofía del respeto mutuo y la cooperación con sus hijos/as y/o alumnos/as y aportan su experiencia para ponerla al servivio de los demás. Además en España, los facilitadores y facilitadoras miembros de la Asociación de Disciplina Positiva España, obtienen apoyo, pertenencia y formación continua, en esta entidad sin ánimo de lucro reconocida como Afiliada Internacional por la Positive Discipline Association, fundadora del movimiento y filosofía de Disciplina Positiva en los años 90 en Estados Unidos.

La Psicología Adleriana, como se le llama hoy en día, toma su nombre de su fundador Alfred Adler, psiquiatra vienés contemporáneo de Freud y colaborador en el Círculo de Viena a principios del siglo XX. Desde muy pronto Adler se desviculó del grupo de psicoanálisis por diferencias esenciales respecto a la naturaleza de la motivación humana y la conducta. Según Adler nuestra vida está dirigida por unas metas que nos llevan hacia adelante y nuestra conducta sirve esta meta. El comportamiento o conducta de cada persona tiene un propósito, entender el comportamiento humano del presente nos ayuda a poder encontrar soluciones para un mejor futuro. Es una filosofía optimista y pragmática que se centra en la acción y el movimiento para encontrar alternativas para un mejor futuro para todo el grupo. Siempre algo es posible para poder mejorar la vida de cada uno. Uno de los puntos centrales de la Psicología Adleriana, nos dice que el ser humano quiere contribuir al bien común para sentir que pertenece y es importante. Contribuimos por salud mental, permitir que los niños se sientan capaces a través de la contribución es crucial en la familia y en la escuela.

El objetivo de Disciplina Positiva es ayudar a mejorar las relaciones entre adultos y niños, creando y permitiendo una relación horizontal donde todos los miembros de la familia o clase son valorados y existe respeto hacia los niños, los adultos y la situación. Para ello es necesario ser amables y firmes al mismo tiempo, guiar a nuestros hijos y alumnos con libertad y orden (límites) manteniendo así el respeto y la dignidad para todos. Cuando el niño percibe que el control de su vida está dentro de si mismo, le permitimos ser y crecer en un entorno alentador (motivador) en el que puede atribuirse la responsabilidad de lo que acontece y asumir la implicación que tienen sus comportamientos. Disciplina Positiva enseña un locus interno de control, en lugar de perpetuar un locus de control externo (castigos y premios) que aunque parece que funciona, solo es temporalmente, además de dañar la autoestima de los seres humanos.

Los siguientes principios de Disciplina Positiva están derivados de la Psicología Adleriana y se experimentan y aprenden en los talleres prácticos en el contexto de la familia, la escuela y la empresa:

1. Relaciones horizontales, misma dignidad y respeto para todos.

2. Gemeinshafstgefüel, el sentido de comunidad o Interés Social, sentirse parte y poder contribuir.

3. Educación a largo plazo/enseñar habilidades para la vida

4. Animar, dar aliento en lugar de alabar

5. Amable y firme a la vez/respeto mutuo

6. Los errores son oportunidades de aprendizaje, enfoque en soluciones

Disciplina Positiva se aplica en el ámbito de la familia, la escuela y las empresas con el deseo de poder trabajar y convivir mediante un liderazgo horizontal que respeta y alienta a todos a establecer una participación activa y constructiva por el bien común y personal.

Cristina Sanz Ferrero

Entrenadora Certificada de Disciplina Positiva para Padres  y Aula, Guía y Formadora Montessori 0 a 6 años, Junta Directiva Asociación Disciplina Positiva España,Asesora Internacional de la Positive Discipline Association Creadora de Life Skills Escuela para la Vida